Lo que hay que saber sobre la SEPA
La película publicitaria de la SEPA realizada por el Ministerio de Hacienda de la República Federal de Alemania es tan bonita como lo que promete: un mundo brillante y luminoso con operaciones de pago sencillas y baratas, relaciones claras y europeos relajados. En este país, por ejemplo, basta con escribir el código bancario y el número de cuenta uno tras otro, precedidos de la abreviatura nacional «DE» más un dígito de control de dos cifras, que el banco titular de la cuenta le comunica, y entonces tiene el nuevo número internacional de cuenta bancaria, o IBAN, para abreviar. Esto permite realizar pagos y reintegros sin efectivo en 34 países entre Cabo Norte y San Marino. Hasta aquí la versión colorida de los dibujos animados. Desgraciadamente, no se ajusta a la situación real.
Como suele ocurrir cuando hay que alcanzar compromisos europeos, florece una cosa en particular: la excepción. Y este biotopo no sólo está densamente poblado, sino que también está en un estado de flujo constante. En lugar de una norma vinculante para la creación de IBAN, en Alemania existen actualmente 57, que se actualizan, es decir, se modifican, trimestralmente. Esto puede leerse en las publicaciones trimestrales del Deutsche Bundesbank; allí aparecen al mismo tiempo las normas actuales para la creación de números de cuenta (aproximadamente 130), así como los códigos de clasificación bancaria actualmente válidos, que son unos 4.000. Es muy probable que en el próximo trimestre se apliquen nuevas normas. Y lamentablemente, todos estos factores son relevantes para la creación de un IBAN válido.
Los clientes que no son bancos privados, es decir, principalmente empresas de todo tipo, tienen de plazo en Alemania hasta el primero de agosto de este año para convertir sus operaciones de pago.
La siguiente mejor oferta de Internet para la conversión del IBAN puede ser totalmente engañosa. Porque muchas herramientas de conversión ignoran las complicadas reglas, producen IBAN no válidos y causan muchas molestias a los usuarios desprevenidos. Cualquiera que haya buscado alguna vez una transferencia extranjera mal dirigida conoce el problema.
El software »TOLERANT Bank« ayuda a realizar el cambio a la SEPA con la máxima fiabilidad: comprueba automáticamente los números de cuenta y los códigos bancarios alemanes. Crea nuevos IBAN y valida los existentes determinando el número de cuenta subyacente y el código de clasificación. A la inversa, el programa permite leer la cuenta y los datos bancarios de un socio extranjero a partir de su IBAN. Los bancos alemanes pueden buscarse por nombre y ubicación. También se comprueba el BIC, un código bancario internacional que se espera que sea obligatorio en las operaciones de pago internacionales hasta febrero de 2016.